mi tío José

ÚLTIMA ACTUALIZACIÓN: 14 Octubre 2016

Jesús María Aguirre Arriola, eibarrés experto en electrónica, antiguo profesor de la Escuela de Armería, amigo, admirador y colaborador en la última etapa de la vida de José Ibaceta, ha tenido a bien responder a mis preguntas sobre el camarote de nuestro protagonista:

Eibar, oct 2016

1.-¿Visitaste a menudo su camarote?

Muchas veces, a partir del año 1992 hasta el fallecimiento de José.  No puedo precisar el número de veces, pero muchas.

2.-¿Colaboraste con él en algún proyecto?

No se si se le puede llamar  proyecto, Pero sí que preparamos una Radio a Reacción, del año 1927…  Con altavoz eptagonal externo… Quedo OK

Tambien relanzamos la reparación-restitución de órganos Helmholtz Church. Esto si que fue una labor importante en la recuperación de  este maravilloso producto, ejemplo de precisión mecánica, eléctrica y acústica.

3.-¿Podrías explicarme en que consistían los siguientes aparatos que hizo y qué pretendía hacer con  ellos?

-Bascula  de émbolos………..No recuerdo que pretendía con ella

-Motor de imanes: lograr con poco consumo, un motor  de rendimiento máximo (pocas perdidas…)  Pero no lo logró, pues el motor apenas daba energía para mantenerse

-Noria múltiple……………Ignoro lo que se proponía

-El primer refrigerador a motor eléctrico, (lo hizo junto a J.L.Elorza) De conseguir el gas preciso para producir el frio necesario, ésta  hubiera sido la primera nevera eléctrica domestica de nuestra zona.

-Máquina de Wimsurst:  Mediante  frotamiento de disco electrostático almacenar carga eléctrica en  una botella de Leyden para producir alto voltaje   Con dos barras  aislandas con extrtemidades esféricas en sus extremos , al acercarlas sin tocarse, producían una enorme descarga atmosférica, a modo de rayos.  Espectacular

4.-¿Llego a patentar algún invento?

Que sepa yo no

5.-¿Hubo alguien que se interesó en producirlo y comercializarlo?

No lo se

6.-¿Cómo podía haberse sacado  “provecho” de su talento?

La enorme fuerza creativa de José, añadida a su más que buena formación en Mecánica y Física,  posiblemente en un ambiente  investigador  y menos de producción  hubiera sido el mejor sitio para él.

7.-¿Eran tan grandes sus conocimientos de electrónica, como dice Iraegui?

Tenía bastante buena formación en Electricidad y menos en Electrónica (aquí supo juntarse con el mejor elemento  conocedor de electrónica que había en Eibar entonces: Jose Luis Elorza Chinchurreta…). Estos dos juntos eran capaces de llevar adelante cualquier asunto que necesitara de todos esos conocimientos y aplicarlos con éxito. Lo demostraron con creces.

8.-¿Cuáles eran, en tu opinión sus principales cualidades?

José Ibaceta: Enorme creatividad. Veía lo que otros no éramos capaces de ver. Aplicaciones mecánicas, eléctricas, electrónicas…  Este era su caldo de cultivo. Fijarse que, cuando Helmholtz   cerro, paso al diseño de  Armas en la fábrica  Star.  Bueno, pues allí desarrolló, junto a otros, unas armas de casi escasísimo retroceso, en virtud de sus conocimientos de mecánica y física.

Su hermano Jesús: un genio de la mecánica. Exquisito en el trabajo bien hecho.

José Luis Elorza: El electrónico del grupo. Imprescindible para llevar adelante lo que hicieron.

Estos tres personajes deberían tener alguna Calle en Eibar

9.-¿Qué más proyectos tenía in mente?.

Bueno, según José, al truncarse Helmholtz, todos sus esfuerzos los llevó al diseño de armas en la Star. Allí  desarrollo su inventiva al máximo.

Cuando se jubiló, empezamos a recuperar el mundo de los Organos electromecánicos, tanto Helmholtz como Hammond.  Ibamos a algunos lugares a reparaciones (Zaragoza, Berriatua…) es decir, sitios donde “sus” órganos habían sido colocados en alguna ocasión. Aquí disfrutaba muchísimo y yo aprendía de todo cuanto él me decía, lo cual fue para mí igual que tocarme la Lotería.

10.-¿Ha habido otros inventores en Eibar?

Creo que algunos si que hay. Pero yo no me acuerdo ahora. Ha sido con José Ibaceta con  el que tuve una relación muy intensa en ese mundo de la ciencia.

11.-Maquina de coser Howe: ¿la primera que entro en Eibar?

Si José Ibaceta dice que aquella maquina fue la primera que entro en Eibar, creo que eso será cierto. Nunca afirmaba nada que no hubiera contrastado antes.

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Taller de Helmohtz en la calle Barrena.

Fotos de la filmacion de "Eibar Industrial" en Helmholtz, 30 Diciembre 1964

Jenaro Ibarguchi Echaniz al teclado del Helmholtz, mientras lo filman a través del chasis de un televisor para el documental "Eibar Industrial".

Vídeos y textos sobre mi tío José Ibaceta Arrate (1926 - 2002)

Breve nota biográfica y profesional

 Desde niño dió muestras de grandes dotes inventivas.
Estudió en la Escuela de Armería, en la cual su padre era profesor, y allí adquirió su afición por la electrónica, en la que desarrolló vastos conocimientos. Hizo una radio de galena y la probó en un terreno tras el cementerio, colocando dos cañas en el suelo y tendiendo un alambre entre ellas a modo de antena; apenas conseguía captar radio San Sebastian en sus auriculares.

Hacia el año 1940 contempló en el ayuntamiento los planos de reordenación de Eibar, que fueron exhibidos públicamente. Inspirado por ello, decidió junto a su amigo Eduardo Iraegui dibujar en un papel alargado su propio plano del Eibar que habían conocido antes de la Guerra, dese Urkizu hasta Amaña, en el cual señaló la posición de los transformadores y otros detalles.

Durante el servicio militar arregló un cañón antiaéreo. Iba muy a menudo a Ondarroa, donde recogía anécdotas de los pescadores que gustaba de narrar, como por ejemplo la de un buzo que tuvo un encuentro con un calamar gigante,.

Tras la "mili" trabajó en la oficina técnica de Beistegui Hnos. ( BH). Allí colaboró en la creación de una bicicleta con motor, la cual fue probada en carretera por un motorista al que José y el jefe de la oficina técnica seguían en un Citröen. En uno de esos seguimientos tropezaron con un camión y desde entonces le quedó un temor por conducir coches. Es posible que cuando la empresa se trasladó fuera de Eibar, José decidiera no seguir con ellos, pero también podría haber decidido dejarla para emprender su propio negicio.

Junto a otros socios (Agustín Elorza y su hermano Jesús Ibaceta) fundó la empresa Helmholtz Electrónica S.A, en la que también invirtieron varios industriales de Eibar. Helmohltz comenzó en un taller de la calle Errekatxu, después pasó al edificio del Casino Rialto y finalmente a la calle Barrena.

Fabricaban reelés para automatismos así como televisores, en una época en que estos aparatos eran importados de otros países. El tubo de imagen lo adquirían de otra casa. El proceso de montaje era manual. Llegaron a haber unos cuarenta empleados.

Unos pelotaris cestapuntistas ermutarras activos en Miami habían regalado un órgano electrónico Hammond, el más avanzado de su época, a la iglesia de Ermua. Sucedió que este órgano se estropeó y entonces el párroco preguntó a Helmohltz si podrían repararlo. José le dijo que podían hacerle una réplica que funcionase. Entonces fueron desmontando el Hammond y averiguando la función de cada componente con ayuda del libro de instrucciones, para lo cual su suegro Antonio Lapeyra se lo fue traduciendo del inglés. Fue así que Helmohltz acabó creando una réplica de gran calidad.

Los concertistas de Hammond que viajaban por Europa para promocionar su producto fueron los que alertaron a los americanos de la existencia del órgano Helmholtz. Casualmente por entonces la compañía estaba buscando algún país del Mercado Común que pudiera producir sus órganos (todavía España no pertenecía al MCE). Los técnicos de Hammond vinieron a Eibar a conocer Helmoltz y quedaron asombrados del nivel técnico alcanzado sin haber tenido contacto con ellos.

La empresa tuvo que cerrar al cabo de unos años, debido a diversos factores: escasa demanda y falta de solvencia de los compradores de órganos, competencia de otras marcas de televisores, falta de promoción de sus productos, etc. J.I se quedó, pues, sin trabajo.

Pasó un año en una empresa de Valls (Tarragona) y en el taller de Rafael Lapeyra en Matxaria. Después entró en la oficina técnica de la STAR , donde sobretodo ejerció de delineante aunque también proyectaba transformaciones de máquinas, montajes y utillajes. Aquí trabajó hasta su jubilación, a la cual anhelaba llegar para poder dedicar más tiempo a sus invenciones. Pudiera decirse que él era un Edison Eibarrés de vocación.

J.I. estaba casado con Rosario Lapeyra (1926-2002) y era padre de cuatro hijos.

Ésta es la portada del DVD que hice a partir del vídeo que grabé en el camarote de trabajo donde J.I. guardaba sus invenciones. El vídeo es deficitario en calidad, al ser una copia de 2ª generación; algunas partes están deterioradas y no conservé la cinta original. Las propias tomas que hice - manteniendo la cámara en una mano de forma precaria, sin encuadrar muchas veces - dejan bastante que desear. No obstante creo que es un documento muy interesante para quien se interese por la electrónica y mecánica; también lo es para quien quiera ver y oír a un eibarrés "pata negra" que participó el apogeo industrial de la ciudad en los años 50 y 60.

Aparatos que aparecen en el vídeo

Báscula de émbolos

"Máquina de chispas"

Máquina de coser Howe, "la primera que entró en Eibar"

Locomotora de vapor en miniatura

Motor de imanes

Radios de los años 30

Noria múltiple para levar agua

Disco de bakelita para gramófono

Casco de la Guerra Civil

He editado el vídeo, reduciendo su duración a unos 31 minutos y medio. Lo he dividido en 6 partes:

José Ibaceta en su camarote (1997). Parte 1 de 6

José Ibaceta en su camarote (1997). Parte 2 de 6

José Ibaceta en su camarote (1997). Parte 3 de 6

José Ibaceta en su camarote (1997). Parte 4 de 6

José Ibaceta en su camarote (1997). Parte 5 de 6

José Ibaceta en su camarote (1997). Parte 6 de 6

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Fotos varias de José Ibaceta

Junto a Julio Lapeyra, circa 1952

Mi madre Teresita Lapeyra presenta un órgano Helmholtz. 1957

En el bautizo de su sobrina Rosa Mari. 1964

Junto a su esposa Rosario Lapeyra. 1964

Entre su esposa y su suegro, Antonio Lapeyra. Años 1960

Junto a esposa, suegros y cuñados. 1968.

Tras mi padre Fernando Martín, un televisor Helmholtz.

En la oficina técnica de Star, a la mesa de dibujo.

circa 2001

Recorte de prensa, 1997